Beneficios de hacer pesas y consejos para las mujeres

May 20

Beneficios de hacer pesas y consejos para las mujeres

El ejercicio es uno de los mejores aliados para nuestra salud, tanto emocional como física. Este nos puede ayudar muchísimo a mejorar la concentración, memoria, coordinación y, de igual manera, ayuda a mantener el cuerpo en muy buen estado. Sin embargo, en muchas ocasiones podemos llegar a escuchar un montón de mitos en torno a cierto tipo de actividad física, y eso nos lleva a perdernos de experiencias maravillosas. Debido a que he empezado a ver en todos lados un tema de desinformación en cuanto a realizar pesas, vengo aquí a desmentir algunas cosas y a contarte todos los beneficios que tiene para nosotras.

Mitos y realidades sobre hacer pesas

Mito: Cuando tenemos un mayor porcentaje de grasa que el marcado por el IMC y hacemos pesas, corremos el riesgo de endurecer la grasa y que se dificulte bajar de peso.

Realidad: Primero, tener un cuerpo grande no sería o no tendría por qué ser un problema. En segunda, no hay forma en que la grasa se endurezca. En realidad, cuando uno hace pesas puede ayudar muchísimo porque estaremos quemando aún más calorías para alcanzar ese IMC que deseamos o, bien, podemos crear músculo para poder tener una mejor salud. Verás:

El cuerpo comienza a trabajar aún más cuando alcanza esa temperatura ideal y un ritmo estable, siendo las pesas perfectas para ello. Por otro lado, la activación del tejido consume mucha energía, por lo que generar masa muscular ayuda no solo a estar trabajando durante el tiempo que haces ejercicio, sino todo el día.

Mito: Los músculos son sólo para hombres / Las mujeres se ven mal con músculos grandes.

Realidad: En cuanto a la forma de tu cuerpo, si tu principal temor es tener un cuerpo de «hombre», no será así. Para llegar a tener cuerpos tan grandes, incluso que muchos hombres biológicos no tienen, se requiere de una biología específica relacionada con hormonas y un régimen muy estricto. En este caso, tu cuerpo tomará tu propia forma, viéndose fuerte y torneado.

Crear músculo definitivamente es para las mujeres. En muchas ocasiones, cuando bajamos de peso y no regulamos el tema del músculo, podemos encontrar mucha flacidez, y definitivamente las pesas nos ayudarán a disminuir este efecto.

Las pesas nos permiten crear músculo que no solo será agradable a nuestros ojos, sino que permitirá construir salud para el futuro. Así es, hay que prepararse porque, después de los treinta o cuarenta, podemos empezar a perder músculo. Incluso puedes prevenir la osteoporosis y cualquier tipo de fractura, sobre todo si hablamos de mujeres, pues aumenta la densidad ósea.

Nos brinda independencia. El músculo te ayudará con resistencia y fuerza para cosas de la vida diaria: cargar cosas, subir escaleras, jugar con tus hijos o nietos. Definitivamente, las pesas son para todos porque nos permiten acceso a una mejor calidad de vida.

Mito: Se tiene que hacer una rutina sumamente larga de pesas para ver resultados.

Realidad: Los músculos requieren de constancia, y eso significa darnos al menos cinco minutos para calentar, veinte de ejercicio y cinco de estiramiento. De esta forma, tienes una sesión completa y agradable. Para realmente ver resultados, necesitas hacerlo al menos tres veces por semana, combinarlo con buena alimentación y descanso adecuado.

Mito: El entrenamiento puede quitar la agilidad y flexibilidad.

Realidad: No se trata de que te quite elasticidad, más bien que es posible que, si en este momento tienes poca flexibilidad y poca fuerza, entonces vayas aumentando tu fuerza y tu flexibilidad se quede ahí. Pero no significa que te quite la capacidad, más bien hay que trabajar ambas partes. Lo que te recomiendo es jamás olvidar el estiramiento al final de las pesas. Haciéndolo a conciencia, puedes mejorar ambas. En cuanto a la agilidad, si logras generar más músculo en piernas, te dará más resistencia; por lo tanto, te sentirás más ágil.

Mito: Se necesita de mucha inversión económica.

Realidad: Aunque estamos acostumbrados a pensar en gimnasio cada que hablamos de pesas, la realidad es que las pesas son objetos con cierto peso, y las máquinas solo nos facilitan un poco la vida en cuanto a posición. Pero no, en realidad no es necesario que compres muchas pesas para casa o que pagues mensualidades. Puedes hacerlo a partir de utilizar objetos de metal que tengas, botellas de agua, garrafones, llantas, incluso cualquier cosa que tengas a la mano. Para poder calcular los pesos, siempre puedes hacer uso de una báscula, etc. Inclusive puedes iniciar con tu propio peso. La idea es despertar esos músculos y ese metabolismo.

Así que, si aún estás dudando si esta es tu mejor opción, definitivamente sí. No importa cuál sea tu meta, puede funcionar perfectamente. Solo tienes que recordar algunos consejos básicos para iniciar con esta nueva vida:

Consejos para empezar a hacer pesas

Cuida mucho tu técnica y postura. Puedes buscar videos de fisioterapeutas que te vayan indicando cuáles son las sensaciones que debes buscar en tu cuerpo. Sobre todo, te mencionarán que hay que mantener la espalda recta y el abdomen fuerte.
Evita los movimientos bruscos. Lo peor que podemos hacer es movernos rápidamente con pesas porque puede causarnos desgarres. Son movimientos controlados, por lo que debes tener mucha conciencia.
Siempre mantén un buen equilibrio y apóyate correctamente. En caso de que te duela alguna articulación, sobre todo si llega a doler codos o rodillas, es un indicativo de que la postura no es correcta, porque no es normal.
Elige bien los pesos que utilizarás. Para hacer músculo, no necesitas más peso, más bien la técnica adecuada. Siempre prioriza tu postura y ve de poco en poco conforme tus sesiones vayan avanzando. Cuando notes que ya no te cuesta levantar lo que antes, es el momento de aumentar y retar al músculo.
Respira. A veces no solo se trata de respirar correctamente, sino de recordar respirar. Podemos pasar tiempo sin oxígeno por el esfuerzo, y no es bueno ni para los músculos, el cerebro o el suelo pélvico. La forma correcta es exhalar cuando hacemos el esfuerzo (por ejemplo, al levantar la pesa) e inhalar cuando relajamos. Recuerda que, al entrar el aire, debemos inflar un poco el estómago y, cuando lo sacamos, debemos hacer un ejercicio de Kegel para cuidar el piso pélvico.
Cuida tus repeticiones y peso según tus objetivos. Si quieres generar resistencia, usa menos peso y más repeticiones. Si quieres volumen, hay que utilizar más peso con un menor número de repeticiones.
Jamás olvides calentar o estirarte. Es indispensable para evitar lesiones y mejorar la reparación del músculo.
Descansa y escúchate. Los músculos requieren tiempo de recuperación, así que, mínimo por semana, debemos dejarlos descansar. Hay que dormir también adecuadamente y, al menor síntoma de mareo, aprende a parar, pues tu cuerpo te está diciendo que es demasiado. Ya sea porque no dormiste adecuadamente, porque estás deshidratada, porque fue peso extremo, porque tuviste una semana cansada y no puede con todo, etc.

Esperamos que todos estos consejos te sirvan mucho para iniciar este nuevo proyecto. Cuéntanos, ¿te gustaría saber algo más sobre el ejercicio de pesas?