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Colitis, pasos y recomendaciones para eliminarla

¿Quieres eliminar de una vez por todas la colitis? Este padecimiento se ha vuelto cada vez más común en el estilo de vida actual. Incluso muchas personas viven sin saber que tienen este padecimiento y normalizando muchos de sus síntomas. En este artículo veremos un poco sobre qué es la colitis, cuáles son sus síntomas y algunos tips para poder disminuir la colitis.

¿Qué es la colitis y cuáles son sus síntomas?

La colitis es una inflamación del intestino grueso o también llamado colon, de aquí su nombre. Ahora, puede tener muchos orígenes entre los que encontramos las infecciones por parásitos, por cuestiones genéticas que pueden provocar úlceras, también tenemos por problemas vasculares o bien de flujo sanguíneo, o el más común: que es por estrés, también llamada colitis nerviosa.

Esta última suele ser causada por condiciones de vida o falta de cuidado del propio cuerpo. Las causas no se pueden precisar del todo, pero las más comunes son las alteraciones de la motilidad, sensibilidad a ciertos alimentos, alteraciones de la flora intestinal y factores psicológicos como el estrés. Se dice que una gran parte de la población puede padecer esto. Suele ser más común en mujeres y en personas entre los 20 y 40 años.

Provoca distensión y dolor abdominal, gases, alteraciones en el ritmo intestinal, periodos alternados de diarrea y estreñimiento. Los síntomas pueden ser constantes o intermitentes. A esta condición también se le llama colon irritable o síndrome del intestino irritable. También hay otras alteraciones que pueden influir negativamente en la enfermedad como gastroenteritis, intolerancias alimentarias, cambios hormonales y factores genéticos.

¿Cómo saber si es colitis?

El problema con la colitis es que suele confundirse con otros padecimientos, pero los síntomas más comunes son el dolor y distensión abdominal y la alteración del ritmo intestinal (se alternan las diarreas con estreñimiento). El dolor suele localizarse en el abdomen inferior, muy parecido a un cólico, con dolor opresivo o punzante. La molestia puede ir desde leve hasta muy fuerte, pero con la ventaja de que suele disminuir en las horas de sueño.

El dolor suele comenzar después de la ingesta de algún alimento o después de algún evento estresante. Otros síntomas son gases, sensación de evacuación incompleta, moco en las evacuaciones y en algunos casos, náusea, vómito y ardor en el tórax. Suele estar más presente en momentos muy específicos de tu día donde hay estrés o estás muy presionado por ciertas actividades y mucho cansancio.

Las formas en que puedes llegar a confirmar este diagnóstico es por medio de pruebas médicas y, claro, con la ayuda de un profesional. Entre los estudios que los doctores suelen enviar para sus pacientes encontramos: pruebas de sangre, análisis de heces o bien colonoscopias. Esto permite poder explorar absolutamente todas las posibilidades para poder identificar la causa de la colitis y así dar un tratamiento eficaz.

¿Se puede evitar la colitis nerviosa? Pasos para eliminar la colitis

Para ver mejoría después de una crisis de colitis debes de realizar distintos cambios en tu estilo de vida. No todos los remedios funcionan para todos, así que ve probando con distintos métodos hasta que puedas ver resultados en el menor tiempo. La clave está en llevar un estilo de vida saludable.

  1. Beber entre litro y medio a dos litros de agua simple al día para prevenir el estreñimiento.
  2. Come pequeñas porciones y con mayor frecuencia. Evita quedar lleno hasta la saciedad.
  3. Realiza actividad física todos los días de acuerdo a tu edad y a tu condición física para mejorar la movilidad intestinal.
  4. Es recomendable llevar una dieta balanceada con comidas bajas en grasas y ricas en fibra y proteínas bajas en grasa, que no lleguen a irritar demasiado el intestino como: frutas, verduras, cereales integrales, ensaladas, etc. Evitar alimentos que provocan muchos gases como col, brócoli, coliflor, leguminosas, frutos secos, bebidas alcohólicas e irritantes como café, tabaco o refrescos.
  5. Identifica intolerancias, recuerda que cada cuerpo es único y que no todos reaccionan igual ante las comidas. En realidad, si pones atención, puedes aprender a leer tu propio cuerpo y saber en qué momentos del día te afectan más y cómo lo hacen.
  6. Aplica fomentos calientes en la zona afectada para bajar la inflamación y consume tés herbales de manzanilla, menta, anís, regaliz, hinojo y jengibre, pero sin tanta frecuencia y consulta con tu médico que no contradiga ningun medicamento que estes consumiendo.
  7. Toma probióticos. Cuidar tu flora intestinal fortaleciendo las bacterias que nos cuidan permite que la inflamación sea menos probable o al menos no tan notoria o molesta.
  8. Consume probióticos diariamente para mejorar el problema de gases y de distensión abdominal.
  9. Trata de controlar el estrés y manejarlo practicando ejercicios de relajación, meditación yyoga. Este para mí sería de los puntos más importantes, pues los síntomas tienen origen en esta situación, una vida llena de pendientes y estrés. El ritmo de vida que tenemos ha provocado que vivamos de esta forma, pero haciendo pequeñas actividades que nos permitan salir de la rutina, hacer ejercicio o simplemente respirar podemos regular un poco más nuestras emociones. Recuerda que el cuerpo habla y, cuando hemos abusado de él, nos lo hará saber. Así que, si lo tuyo no es un deporte específico, salir a caminar al menos 20 minutos al día te cambiará la vida.
  10. Considera técnicas como psicoterapia o acupuntura, los cuales han mostrado mejoría en algunos pacientes.
  11. Visita a un gastroenterólogo para que te pueda recetar el medicamento que necesites comoespasmolíticos, antidiarreicos, laxantes, antidepresivos, ansiolíticos o estimulantes de la motilidad.
  12. Si empiezas un tratamiento, no lo dejes a medias cuando empieces a ver mejoría. Continúa con él el tiempo recetado por el médico.
  13. Es importante respetar los horarios de comidas y sueño.
  14. Evita el uso excesivo de medicamentos. Aunque no lo creas, los medicamentos no siempre son lo mejor para el cuerpo, a veces suelen ser muy fuertes y eso hace que nuestro intestino se inflame. Por eso es que no debes automedicarte ni tampoco suspender tratamientos cuando tú lo decidas o tomar durante un tiempo muy prolongado tratamiento. Debes acudir con especialistas para constatar que aún es adecuado y que no ha causado daños, incluso no solo en el intestino sino en cualquier otro órgano.

Esperamos que todos estos tips te sean de mucha ayuda y que puedan permitirte tener una mejor calidad de vida, evitando tener días de molesta inflamación. No olvides consultar a tu médico, en ocasiones puede que te envíen medicamentos específicos o bien con un nutriólogo que te guíe sobre tu alimentación y te acompañe en esta nueva rutina de hábitos más saludables para cuidar no solo de tu colitis sino de tu cuerpo en general.

ico nancy
Escrito por:
2024-12-23

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