Los problemas de fertilidad pueden darse tanto en mujeres como en hombres y las principales causas están relacionadas con factores como la edad de la mujer, desordenes hormonales, falta de ovulación o en el caso de los hombres, problemas con el conteo de espermatozoides.

Por lo anterior, muchas parejas acuden a clínicas de fertilidad en busca de un tratamiento asistido que los ayude a convertirse en padres y, aunque es un proceso que suele tener un final feliz, también es justo saber que demanda de energía, tiempo y dinero, por lo que para afrontarlo hay que prepararse tanto física como emocional y económicamente.

En este artículo encontrarás una serie de consejos importantes que te servirán para llevar un mejor tratamiento de fertilidad y así tener mayores probabilidades de éxito.

5 consejos a tener en cuenta para llevar un mejor tratamiento de fertilidad

Aunque son muchos los buenos consejos que puedes conseguir en relación con los tratamientos de fertilidad, quizás estos cinco sean los más importantes.

Aceptar el problema de fertilidad

No es nada fácil reconocerte a ti mismo/a que tienes un problema de fertilidad. De hecho, enterarse de ello puede generar sentimientos de tristeza y frustración tanto individuales como en la pareja. Sin embargo, no es recomendable buscar culpables y quedarse mucho tiempo en esa etapa de negación ya que la única manera de poder plantarle cara a la situación y buscar soluciones factibles es aceptándola.

 

Entonces, tómate tu tiempo para internalizar y comprender que tienes un problema de fertilidad, luego busca ayuda médica e indaga en los diferentes tratamientos que puedes realizar para poder tener hijos de forma natural.

Apóyate en tu pareja

Tu pareja debe convertirse en tu pilar incondicional tanto al aceptar tu problema de fertilidad, como en el momento de tomar la decisión de comenzar un tratamiento. Este es un proceso muy importante que trae muchos cambios tanto emocionales como físicos, espirituales y económicos, por lo que lo mejor será que ambos os deis todo el apoyo que sea posible para enfrentarlo juntos.

Ponte en las mejores manos

Acude a la clínica de fertilidad de tu preferencia y ponte en manos expertas. Si no conoces ninguna, en internet podrás encontrar algunas como CREA, IVI, Fertia o Eugin, las cuales tienen una gran reputación y experiencia. 

Durante cada consulta un médico especialista te guiará a través de diferentes pruebas físicas y exámenes químicos para determinar cuál es el origen del problema de fertilidad que tienes y posteriormente te recomendará el tratamiento de fertilidad que considere más idóneo según sea tu caso, el cual eventualmente será exitoso.

Si está a tu alcance, es aconsejable pedir más de una opinión médica que te permita tener seguridad acerca de tu diagnóstico y sobre las posibilidades de efectividad de los futuros tratamientos que puedas realizarte.

 

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Menos ansiedad y más positivismo

Es muy común que las mujeres que entran en un tratamiento de fertilidad experimenten problemas de estrés y ansiedad. Esto se debe a que de manera recurrente llegan a su mente pensamientos negativos relacionados con escenarios en los que el procedimiento no resulta exitoso. 

Evidentemente esto tiene un efecto perjudicial que se refleja tanto emocional como anímicamente y que puede intervenir en la ovulación o fecundación, por lo que lo más recomendable es bajar los niveles de ansiedad e intentar a toda costa tener una actitud positiva y pensamientos saludables. Recuerda que este es un proceso que exige mucha paciencia, tranquilidad y optimismo.

Sé realista

Aunque es fundamental enfrentar el proceso con positivismo y una buena actitud, también debes ser realista acerca de las posibles dificultades que puedan presentarse y estar al tanto de los riesgos que existen de que el tratamiento no de los resultados deseados. De esa manera tendrás expectativas más objetivas y sabrás cómo reaccionar en el momento de tomar decisiones importantes.