Cumpleaños – No te compliques, a ellos no les importa
Artículo escrito por Male Capetillo convocatoria SeBuscanMamás
Hoy día convivo con miles de padres y madres para quienes celebrar un cumpleaños es casi una tortura, desde el presupuesto a la lista de invitados, las mesas de dulces y los inagotables e inacabables extras.
¿Pero qué se necesita realmente para celebrar un cumpleaños infantil?
Si le preguntas a mi hijo mayor: Una vela y un pastel, eso es todo lo que el necesita en la vida todo lo demás le es por añadidura, el momento donde sus ojos se iluminan y se le dibuja una sonrisa en la cara es cuando el pastel llega a la mesa y se enciende la vela. Ahí sucede la magia.
Dicho lo anterior recuerda que no se trata de comprar con la “persona de moda” o la “empresa del momento” como madres podemos ponerle a la fiesta un toque personal y propio, respira, no es una competencia, es un gran día que debe disfrutar el festejado y también tú: recuerdo a una amiga mía muy preocupada porque su hijo quería el cumpleaños nuevamente los paw patrol y eso la angustiaba ¿Qué iban a decir los invitados?¡Nada mamá! ¡No van a decir nada! Tú vas a tener el plus de reutilizar cosas del año pasado, corregir y aumentar, la experiencia de haber usado ese tema y tu hijo: lo que anhela. Sí alguien va a una fiesta a dejar comentarios negativos, puedes ahorrarte la invitación el año que viene supongo.
Los niños no saben de la mesa de dulces más cara, de las etiquetas personalizadas por diseñador profesional, de las flores de papel, el marco para fotos, el show de moda y la sala de fiestas perfecta; lo que saben es de ti, mis mejores recuerdos son de mi madre tomando ideas de revistas y haciendo unos dulceros de panda con la ayuda de mi abuela. Tú puedes hacer tanto, basta confiar en tu instinto de madre y si no eres buena para las manualidades, te aseguro que no te va a faltar una amiga, familiar o hasta vecina que le encante cortar papel de china y jugar con diamantina. (Hola soy Male y me encanta)
No te pases el poco tiempo libre en citas con banqueteras y organizadores de eventos pasando de lado a la persona más importante de ese día; ni te agobies por el gasto, hay miles de maneras de reutilizar lo que ya tienes en casa, de seguir tutoriales, círculos de redes sociales de segunda vida y fiestas que podemos compartir con otra mami porque nuestros hijos son mejores amigos, lo que hará los gastos más llevaderos y podernos permitir ese pastel de ensueño que iluminara la carita infantil que nos aviva el corazón.
Un niño resume su cumpleaños en soplar el pastel, comer dulces y recibir regalos.
Todo lo demás, no les importa tanto, así que no tienes que competir con la fiesta del vecino, gastar medio sueldo en la sesión de fotos para tal o cual revista social… Para ellos no es necesario. Lo que van a atesorar es pasar tiempo contigo rellenando la piñata, armando los recuerdos para sus mejores amigos y esperando en la terraza o el local que lleguen sus invitados.
Lo que quieren los niños esas fechas es que sea SU día y quieren que lo sea contigo, así que no subestimes el poder de tus manos y tu creatividad, no temas preguntar a amigos si no tienen alguna decoración que puedas usar, consultar estos blogs de mamás, Pinterest y YouTube para aventurarte a realizar ideas que le den un plus a este momento especial (en Tips de madre hay hermosas ideas y sus lectoras siempre estarán dispuestas a dejarte alguna más.)
La simpleza de la mesa de tu casa, escuchar a sus abuelos, tíos y amigos cantarles y aplaudirles mientras piden su deseo y descubren que ya pueden apagar la vela sin ayuda.
Morder un gran pedazo de su pastel favorito sin que nadie ponga objeciones y embarrarse haciéndolo si es preciso.
Romper la envoltura y ver un juguete del que ignora el precio y marca pero que es suyo, ver su sonrisa cada que le dan un abrazo, lo que a ellos les importa es participar haciendo dulceros, llenando piñatas, decorando la sala o poniendo la mesa.
Lo que a ellos les importa es que los cargues por el aire con el orgullo explotando en tu corazón porque lo ves feliz y ellos sonríen contigo y tu emoción de haber logrado la fiesta perfecta sin apegarte a presiones sociales ni etiquetas.
La mejor fiesta es aquella que cuando termina te deja cansado de tanto reír y no angustia de lo que hay que pagar.
Porque su mejor regalo papá y mamá, eres tú en su vida.
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