Consecuencias del contacto con el humo del tabaco e ingesta accidental
Para poder entender porque el tabaco es perjudicial para todo ser vivo, primero tenemos que refrescar nuestra memoria sobre cuáles son los ingredientes del tabaco y por que hacen mal.
¿Qué contiene el tabaco? Ingredientes nocivos
Si un niño toma una bocanada de humo de un cigarrillo normal, recibirá más sustancias nocivas además de la nicotina. No solo monóxido de carbono que daña los vasos sanguíneos, sino también alquitrán que se adhiere a los cilios y provocan rigidez, Cianuro de hidrógeno que comúnmente es utilizado como pesticida industrial o metanol conocido como combustible para aviones de combate y misiles. Todo eso, entre otros componentes nocivos y aditivos químicos que le dan al cigarrillo un mejor sabor. El tabaco a menudo también se blanquea con productos químicos que no hacen bien a la salud.
Hay que tener en cuenta también, las sustancias causadas por la combustión que se produce durante el acto de fumar son aún más dañinas que en su forma pura.
Convivir en un ambiente con tabaco
¿Qué es el tabaquismo pasivo?
Fumar de forma pasiva es inhalar el humo de tabaco siendo no fumadores. Esto sucede especialmente cuando se fuma en el ambiente donde nos encontramos. El humo inhalado puede originarse en el cigarrillo o en el aire de exhalación de los fumadores. Si un niño se encuentra en una habitación donde fuman, también estará fumando de manera pasiva.
Cuando la habitación es pequeña, se fuma mucho y la ventilación es deficiente, el niño recibe una mayor cantidad y está en contacto con el humo de tabaco en el interior y es más dañino aún. Uno de cada tres niños menores de cuatro años está expuesto regularmente al humo. Para los niños menores de un año, esto es incluso más de la mitad. Se estima que uno de cada cinco padres fuma mientras alimenta a los bebés y el diez por ciento fuma en el auto.
El feto también fuma pasivamente durante el embarazo, no solo cuando la madre fuma, sino también cuando está en un lugar donde están fumando.
Algunos niños no tienen ningún problema visible con el humo en el momento, pero muestran efectos adversos posteriormente o en un examen médico.
¿Por qué es perjudicial el humo del cigarro?
Como hemos dicho anteriormente, en el humo hay sustancias nocivas como la nicotina y el monóxido de carbono. Estas sustancias causan daño a los órganos de tu hijo. El humo también suprime el funcionamiento del sistema inmunológico, que es importante para proteger al niño contra diversas infecciones.
Fumar duplica las posibilidades de que un niño muera como resultado de la muerte en la cuna, tanto durante el tabaquismo pasivo durante y después del embarazo. La principal razón para esto parece ser la regulación respiratoria alterada y el desarrollo pulmonar.
Los niños pequeños son particularmente vulnerables a las consecuencias del tabaquismo pasivo, porque sus órganos y especialmente las vías respiratorias aún están en pleno desarrollo.
¿Cuáles son las consecuencias del tabaquismo?
El tabaquismo pasivo por parte de los niños puede tener varias consecuencias perjudiciales. Como por ejemplo:
– Efectos agudos
Los efectos agudos significan que los efectos son a corto plazo. Estos efectos generalmente pasan automáticamente cuando se termina la exposición al humo.
A veces se puede ver claramente que los niños sufren con la exposición al humo. Tienen lágrimas en los ojos o la nariz roja, estornudan o tosen.
– Efectos tardíos
Son los efectos que a menudo solo se hacen visibles más tarde y son a menudo permanentes. Los hijos de madres que fuman durante el embarazo tienen un menor peso al nacer, menor circunferencia craneal y, a menudo, pulmones y vías respiratorias más pequeños. También aumenta la posibilidad de aborto involuntario y complicaciones durante el parto.
Además, hay más posibilidades de contraer infecciones respiratorias como de otro tipo. Uno de cada dos a cinco niños con tabaquismo pasivo tiene infecciones agudas o crónicas del oído medio. Esto puede requerir la colocación de tubos en el tímpano.
Los niños con asma que fuman pasivamente sufren mucho más de su asma. Reciben más ataques de asma y estos ataques de asma suelen ser más graves. A causa de esto, necesitan más medicación y deben ser ingresados en el hospital con más frecuencia. Aunque el tabaquismo pasivo no suele afectar a la aparición de asma.
Estudios recientes nos dicen que los niños fumadores pasivos también reportaron un riesgo de cáncer de pulmón entre una y tres veces mayor.
Por último, se sospecha que los niños que fuman pasivamente tienen más problemas de comportamiento o de aprendizaje, incluido el síndrome de Hiperactividad con déficit de atención (TDAH).
Adicción
Uno de cada dos niños menores de quince años se vuelve adicto a la nicotina. Cuanto más a menudo están en un ambiente con humo de tabaco, mayor es la posibilidad de adicción.
Los bebés que han estado expuestos al humo del tabaco durante el embarazo debido al tabaquismo pasivo de la madre ya tienen la posibilidad de desarrollar una dependencia de la nicotina.
Ingesta de cigarrillos
La ingestión de cigarrillos o colillas de cigarrillos ocurre principalmente en niños pequeños (0-4 años).
La absorción de la nicotina contenida en el tabaco se produce principalmente a través de la boca y la mucosa intestinal y está influenciada, entre otras cosas, por la acidez y el contenido de nicotina del tabaco.
Un cigarrillo contiene suficiente nicotina para causar una intoxicación grave en un niño pequeño. Si tienes sospecha de que tu hijo a ingerido alguna colilla de cigarrillo debes ir al hospital.
Algunos de los síntomas son causados por la nicotina y ocurren rápidamente (<4 horas). Los síntomas que se deben tener en cuenta son: transpiración, nauseas y vómitos, palpitaciones entre otros. Si se presentan estos síntomas, el niño debe ser ingresado en el hospital.
Toxicidad
El tabaco contiene nicotina. La nicotina es una de las principales causas del efecto adictivo pero también anestésico del fumar. También es un poderoso veneno nervioso utilizado en insecticidas. La nicotina también es venenosa para los humanos: por ejemplo, si un niño pequeño se comiera un cigarrillo, incluso un cigarrillo liviano, la cantidad de nicotina ingerida es suficiente para causar una infección grave o incluso la muerte. Esto también se aplica a los parches de nicotina y al chicle de nicotina, que se usa como ayuda para dejar de fumar.
Tratamiento de la ingesta accidental de cigarrillos
Lo primero es intentar mantener la calma lo más posible para no poner nervioso al niño y que se sienta peor. Intenta retirar cualquier residuo de tabaco de la boca con un paño húmedo y dale al niño algo de beber.
Si el niño ha tragado más de un cigarrillo o colilla, debe ser llevado al hospital para observación y monitoreo cardíaco durante varias horas. Incluso si la cantidad ingerida no se puede estimar, tienes que llevar al niño al hospital para que el médico lo revise.
Normalmente el número de cigarrillos o colillas de cigarrillos que se tragan es desconocido. Los padres con los nervios no saben cuántos cigarrillos había en el paquete, el niño también podría haber aplastado o desechado algún cigarrillo, etcétera. La cantidad de cigarrillos que se tragan no suele determinar el protocolo, sino especialmente si los síntomas mencionados están presentes o no.
Ante una sospecha de ingesta de cigarrillos, se indica una observación cuidadosa durante 4 horas con un monitoreo regular de las funciones vitales (conciencia, respiración, pulso y tensión). Según el hospital, esto se puede hacer en la clínica ambulatoria o el tratamiento diurno del departamento de Pediatría o la sala de emergencias.
Consejos y prevenciones
– Lo ideal es que nadie fume en la casa. Si algún miembro de la familia fuma, sería buena idea que no lo hiciese en presencia del niño.
– Si viene una visita a casa, lo mejor es explicarles e invitarlos a que no fumen dentro del hogar sino que fumen antes o después de la visita.
– Si algún fumador en la casa, es muy importante mantener todo lo referente al tabaco fuera del alcance de los niños.
– Asegúrate de que tu hijo no entre en ambientes con humo de tabaco.
– No lleves a tu hijo a áreas con humo, busca un café o restaurante libre de humo. Hoy en día la mayoría lo son, y los fumadores tienen espacios restringidos para fumar.
– Pregunta si tu hijo puede jugar en una habitación para no fumadores o al aire libre cuando visites a personas que fuman.
Incluso si no fumas, puede ser difícil pedirle a la familia u otros visitantes que no fumen en tu casa. Algunos consejos para estos casos:
– Avisar a la familia y amigos de las reglas de no fumar en casa.
– Ser claro con las visitas que no pueden fumar en tu casa. A veces es útil hacerlo durante el embarazo. Esto evita que tengas que explicar esto todo el tiempo una y otra vez.
– Asegúrate de no tener ceniceros en casa, esto también es una señal clara para las personas que se espera que no se fume.
– Solicita una enfermera de maternidad o niñera para no fumadores. A menudo es posible indicar con anticipación que te gustaría tener una enfermera de maternidad para no fumadores. Una niñera que tampoco fume, o sepa que no es posible fumar cerca de los niños es una tranquilidad cuando debes estar ausente.
– No se puede fumar en la mayoría de las guarderías. Pero nunca está de más preguntar esto cuando registras a tu hijo en un centro infantil.
Toda la información que te damos en este artículo es orientativa ya que cada persona es diferente por lo que para establecer un diagnóstico y un tratamiento es indispensable que acudas a su pediatra.
Carolina González Ramos
Edda Virtual Solution
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