¿Qué te interesa?
estres infantil

Causas comunes del estrés en niños (infantil)

Aunque el estrés y la ansiedad ha sido considerado habitualmente como un padecimiento propio de los adultos, está comprobado que los niños también lo sufren, incluso desde sus primeros meses de vida, pues entre sus causas se encuentran los constantes cambios en nuestro entorno, los cuales influyen directamente en ellos.

Los signos de estrés y ansiedad en los niños a menudo aparecen como cambios físicos o de su comportamiento.

Hay que tener en cuenta que los niños responden de manera diferente al estrés dependiendo de su edad, de su personalidad individual y habilidades de afrontamiento entre otras cosas, por lo que muchos padres pueden pasar por alto los problemas subyacentes que pueden estar causando el comportamiento de sus hijos. Es importante que los padres reconozcamos los signos de estrés infantil y de está manera buscar las posibles causas. Por lo general la familia puede ayudar a los niños a controlar su estrés y su ansiedad, pero en algunos casos es positivo que puedan beneficiarse de la ayuda profesional.

En el caso de los niños, la etapa de la infancia está plena de cambios y nuevas experiencias, el desarrollo físico que implica la muda de dientes, aumento en el volumen corporal y la estatura, así como el hecho de avanzar a nivel escolar, tener cada año maestros y compañeros nuevos. El estrés en los niños empieza cuando tienen comportamientos difíciles, la mayoría de los maestros o padres de familia piensa que están teniendo un mal comportamiento por otros motivos, pero lo que vemos es que estas conductas se derivan de situaciones de tensión ante las cuales los niños se encuentran inestables y confundidos.

¿Los niños saben que tienen estrés? ¿Cómo es un niño estresado?

En muchos casos, los niños no saben bien cómo identificar emocionalmente lo que los hace sentir mal, por ejemplo en una discusión entre sus padres, pero su cuerpo sí reacciona, y los especialistas pueden detectar los cambios fisiológicos que se registran mientras ven discutir a sus padres, a través de mediciones como la tasa cardíaca, la temperatura periférica y la respuesta muscular, las cuales evidencian la presencia de estrés.

El estrés es una respuesta necesaria para la vida, todos vivimos con él pero en niveles bajos, la clave está en saber canalizarlo para que actúe a nuestro favor y hacerlo un aliado para que los niños puedan sacarle provecho y alcanzar sus metas al tiempo que se liberan de él.

Los niños pueden no reconocer su propia ansiedad y a menudo carecen de la madurez suficiente como para explicar sus problemas estresantes reales o imaginarios. Esto puede causar que surjan una variedad de signos físicos y de comportamiento, y los padres pueden no estar seguros de si se trata de síntomas de ansiedad o un problema de salud. Por eso os damos algunos datos de los signos habituales.

Algunos signos comunes de estrés y ansiedad:

 

  • Conductual o emocional
  • Dificultad para concentrarse
  • Cambios de comportamiento, como mal humor, agresión, mal genio o aferramiento.
  • Miedos (miedo a la oscuridad, estar solo o extraños)
  • Desarrollo de un hábito nervioso, como morderse las uñas.
  • Retirarse de familiares o amigos
  • Negarse a ir a la escuela.
  • Meterse en problemas en la escuela
  • Acumular elementos de aparente insignificancia
  • Disminución o aumento del apetito.
  • Quejas de dolores de estómago o dolores de cabeza.
  • Problemas de sueño o pesadillas.

Causas comunes de estrés infantil

La fuente de ansiedad y estrés en los niños puede ser algo externo, como un problema en la escuela, cambios en la familia o un conflicto con un amigo. Los sentimientos de ansiedad también pueden ser causados por los sentimientos y presiones internas de un niño, como querer salir bien en la escuela o encajar con sus compañeros. Algunas causas comunes de estrés en los niños incluyen:

Grandes cambios en la familia

Algunos de los cambios importantes en la vida que pueden provocar estrés en los niños pueden ser por ejemplo el divorcio, una muerte en la familia, mudarse o el nacimiento de un nuevo hermano. Estos fuertes cambios pueden sacudir el mundo de tu hijo. Los cambios importantes en la vida pueden golpear la sensación de seguridad de un niño, y esto puede generar confusión y ansiedad. Por ejemplo, un nuevo hermano puede hacer que un niño se sienta amenazado y celoso.

Inestabilidad parental

El dinero y las preocupaciones laborales, la agitación familiar pueden generar una abrumadora sensación de impotencia para los niños que pueden sentir que quieren ayudar, pero no tienen los medios para hacerlo.

Horarios demasiado apretados

Correr constantemente de una actividad a otra puede causar mucho estrés a los niños que generalmente necesitan un tiempo de inactividad y ocio silencioso de vez en cuando.

Presión académica

Muchos niños experimentan ansiedad por querer ser buenos en la escuela. La presión académica es particularmente común en los niños más perfeccionaras que tienen miedo de cometer errores o que temen no ser buenos en algo.

Popularidad

Para los niños de primaria más jóvenes, la ansiedad por separación puede ser un problema común. A medida que crecen, la mayoría de los niños quieren encajar con otros niños, y la presión para encajar y ser popular puede ser agonizante para algunos niños en determinados periodos.

Acoso

La intimidación es un problema grave para muchos niños. Puede ser sutil u obvio y puede provocar daños físicos. Los niños que son intimidados a menudo se sienten avergonzados por ser atacados, y pueden ocultar el acoso a los padres o maestros por temor a llamar la atención sobre sus supuestas debilidades.

Malas noticias en los medios de comunicación

Los titulares de las noticias y las imágenes que muestran los desastres naturales, el terrorismo y la violencia pueden ser molestos para los niños. Cuando los niños ven y escuchan sobre noticias terribles, pueden preocuparse de que algo malo les pueda pasar a ellos o a alguien que aman.

Por ese motivo si bien no podemos excluirlos de la vida real, si es importante que en casa no se esté constantemente con la televisión o la radio escuchando las noticias una y otra vez a diario, y cuando por el motivo que sea las vean deben ser explicadas por los adultos para que puedan comprender y no se queden con dudas y miedos.

Una película de terror o un libro

Algunas historias de ficción también pueden causar angustia o ansiedad en los niños. Los niños se ven comúnmente afectados por escenas aterradoras, violentas o perturbadoras de una película o pasajes de un libro. Algunos niños pueden ser más sensibles al contenido de los medios que otros, y es una buena idea saber qué puede molestar a tus hijos, para limitar el contenido de los medios violentos y apegarse a películas, libros, videojuegos y otros medios apropiados para su edad.

Cómo ayudo a mi hijo con el estrés

Hay formas saludables en las que tu hijo puede hacer frente y responder al estrés, solo necesitan un poco de ayuda y orientación. Algunas de las maneras en que puedes ayudarle:

En casa

Haz que vuestro hogar sea un lugar tranquilo y seguro para visitar.

Crea un ambiente hogareño relajado y comprometido con cierta rutina. Las cenas familiares o las noches de juegos pueden prevenir la ansiedad y ayudar a aliviar el estrés del día a día.

La comunicación es un punto importante para lograr la confianza de los hijos, en la medida en que los padres se acercan a los pequeños, y se muestran dispuestos a escucharlos y a entender todo aquello que para ellos puede ser importante, se crean lazos de unión, confianza y amor, los cuales son determinantes para que los pequeños alcancen un desarrollo completo y sin la presencia de elementos tan negativos como el estrés.

Aprende a escucharle realmente, sin ser constantemente crítico o resolver problemas por él. Lo mejor es brindarle orientación para enseñarle formas de comprender y resolver por si mismo los problemas que le perturban.

Mantenlos involucrados

Es bueno que avises a tu hijo sobre cualquier cambio anticipado y hables con él sobre los nuevos escenarios. Por ejemplo, si vas a empezar en un nuevo trabajo en una nueva ciudad, ¿qué significará para ellos en términos de una nueva escuela, nuevos amigos y un nuevo hogar?

Involúcralo en actividades sociales y deportivas donde pueda tener éxito haciendo algo que le gusta. Dale oportunidades donde pueda tener control sobre una situación en su vida.

Tus acciones

Adopta hábitos saludables como el ejercicio y el cuidado personal para controlar su propio estrés de manera saludable. Los niños a menudo imitan los comportamientos de sus padres.

 

Toda la información que te damos en este artículo es orientativa ya que cada niño y cada familia son diferentes y únicas.

 

Carolina González Ramos

Edda Virtual Solutions

¿Tienes alguna pregunta o comentario? ¡Escríbenos!


¿Te gustó el artículo? ¡Regálanos un like o compártelo a tus conocidos!

Compartir en WhatsApp

También te puede interesar: